Comenzamos Octubre. El pasado jueves, el departamento de análisis de Bankinter nos presentó su informe de estrategia para este cuarto trimestre del año que comenzamos. A continuación, os resumimos las principales conclusiones del mismo:
Nos encontramos en un nuevo contexto económico.
Un entorno en el que los tipos de interés son positivos, una inflación mayor, unos crecimientos algo más generosos cuando se estabilicen, todo ello acompañado de mayores tensiones geoestratégicas. En este entorno, el mercado tenderá a ajustarse en las próximas semanas y a estabilizarse en los próximos 2 ó 3 meses. Posteriormente, todo aquello en lo que hayamos invertido nos generará rentabilidades positivas.
Es imposible vender en máximos y comprar en mínimos.
Actualmente el mercado se encuentra en unos niveles que nos permiten reposicionarnos progresivamente. Considerando el S&P 500, que es el único índice que tiene descontados unos beneficios por acción razonables y confiables, el S&P 500 a 3.700 comienza a estar en precio en términos de valoración. Nos encontramos cerca de niveles atractivos de compra. 3.500 es nivel de compra y 3.300 (probablemente no lo veamos) es nivel de compra agresiva.
Inmobiliario.
Venimos de dos años muy buenos y deberíamos entrar en una fase de ajuste de precios, después de un ajuste en transacciones. Existe una sobrevaloración de precios en vivienda debido al incremento de los costes de financiación, los costes energéticos y el coste de la vida. Todo ello, hace que la tasa de ahorro de los inversores disminuya. Por último, la inversión en vivienda pierde atractivo respecto de otros activos como puede ser la deuda pública. Actualmente la rentabilidad por alquiler es del 3,7% frente al 3,3% del bono a 10 años. El diferencial de ambos activos (40 p.b.) se ha reducido por debajo de la media histórica.
EUR/$ El $ seguirá fuerte tanto por méritos propios como por deméritos de otras divisas.
Juega a su favor el diferencial de tipos de interés, el diferencial de inflación, y la seguridad energética. Por contra el Euro tiene en contra el poco margen de maniobra del BCE, la guerra está más cerca y siempre existe un riesgo de fragmentación. Bankinter estima que para el 2023 y 2024 una horquilla (0,9 – 1).